viernes, 9 de enero de 2009


Dedicado a los niños y niñas de todos los rincones de éste planeta, a los papás que a veces no entienden que para acercarse a Dios, hay que hacerlo de corazòn, como un niño, y darnos cuenta que tenemos mucho que aprender de Dios y magnificencia y el poder de su amor. ËL está en todas partes , el susurro del viento, el oleaje del mar, las nubes que forman figuras al viajar por el vasto firmamento, el canto de un ave, lo maravilloso de su creación, todo el arte y la inspiraciòn pertenecen y provienen sòlo de Dios. Lo suave, lo sutíl, lo exelso, lo maravilloso, eso es de Dios todo lo puro y santo.
........ Una niñita dijo a su papá: " Yo deseo que tú, de mi parte,
le digas algo a Dios, algo que ardientemente le deseo decir
Mi voz es tan débil, que seguramente él no me podrá oír allá
en el cielo. Pero tú tienes una voz de hombre grande y segura-
mente a tí te oirá. Además no sè orar con palabras tan bonitas
como lo hacen los pastores". El padre, carñosamente tomó a la
pequeña en sus brazos y con suma ternura le dijo: " Hija, no ne-
cesitas usar palabras especiales para hablarle a Dios, simple -
mente háblale desde tu corazón y, aunque Dios estuviese ro -
deado de todos sus santos ángeles y éstos estuvieran cantando
uno de sus más bellos y dulces cantos que jamás se hubiesen en-
tonado en el cielo, él les diría.......- ¡ Silencio ! ¡ Silencio !
¡ Hay una niñita que desea susurrar algo en mi oído.....!
Mateo 6; 7 Y orando, no useís vanas repe-
ticiones como los gentiles, que
piensan que por su palabrería
serán oídos.
Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis
orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.
Marcos 11; 24

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